Desvariando un poco... parte I

El otro día en mi caminata diaria de 4 o 5 comunas como muy comúnmente hago para cultivar mis glúteos de acero y piernas perfectas, me doy cuenta súbitamente d que me encuentro en un camino de tierra en quien sabe qué terreno olvidado del señor (no sé a qué señor en particular se refiere esta expresión pero yo presumo que al señor q cuida todos los terrenos del mundo... igual mejor pregúntenle a un adulto o a un carabinero).

Algo en mí me decía que había caminado más de la cuenta. Claro que ese “algo en mí” se veía un pokitín influenciado por el hecho de que no había indicios de civilización en kilómetros a la redonda… y pq mis glúteos me dolían casi tanto como la mañana después d aquella noche de copas con shaqueel o’neil... pero bueno… ahí estaba yo, sin ningún lugar adonde ir, más que seguir el camino de tierra. Creativamente, eso hice. Y al pasar la primera colina me encuentro con una fortaleza… Con un portón que se extendía al cielo varios metros, casi tanto como las sábanas a la altura de mi ombligo la mañana después d aquella noche de copas con shaqueel o’neil... ; ). En la puerta había un extraño escrito con tiza en latín que decía algo así: “habemus papa, peru queremost tomate” y como yo no hablo latín decidí investigar qué recorcholis significaba aquél profético escrito. Sin embargo no iba a llegar y tocar sin saber donde era que estaba tocando (curiosa frase) por lo tanto decidí abrir una pequeña ventanita que estaba a metro y medio al lado del portón.

No podía entender lo que veía. Parecía ...


Espere el próximo posteo pa cashar el terrible de desenlace

cuidense

PaLiFoNk


Pd: Shaqueel si estás leyendo esto, por favor llámame.